SALMAN RUSHDIE: LIBERTAD DE EXPRESIÓN AL FILO DE LA NAVAJA
En tiempos en los que la digitalidad provoca que se piense que la libertad de expresión y la democratización de la información se viven a flor de piel, el caso de Salman Rushdie resuena a nivel mundial para cuestionar tal aseveración.
Por: Andrea Ramírez Gastón
El pasado viernes 12 de agosto, el novelista británico de origen indio fue apuñalado en el cuello mientras participaba en una conferencia en Nueva York. El sospechoso, Hadi Matar de 24 años, fue detenido en el acto. Un día después, se informó mediante un comunicado que el sospechoso fue acusado formalmente de asalto e intento de asesinato en segundo grado.
¿Quién es Salman Rushdie?
“Nunca me consideré un escritor preocupado por la religión, hasta que una religión empezó a perseguirme”
Más que cobijo
Es así como se llamaba la ponencia en la que el escritor sufrió el máximo atentado contra su vida; porque cabe recalcar que Rushdie carga el peso de haber vivido casi una década en la clandestinidad y más de 3 recibiendo amenazas de todo tipo, debido a que en 1989 fue “sentenciado a muerte” (fatua) por el máximo líder político religioso de Irán, el Ayatolá Khomeini debido a que consideraba blasfema su novela “Los versos satánicos”.
Una fatua (fetua o fatwa) es un pronunciamiento de carácter legal de la ley islámica. La que se realizó en contra de Rushdie estuvo a cargo del entonces ayatolá (alta autoridad religiosa) de Irán, Ruhollah Jomeini. Este es el contenido de la fatua:
“En el nombre de Dios,
Somos de Dios y a Dios volveremos.
Estoy informando a todos los valientes musulmanes del mundo que el autor de ‘Versos satánicos’, un texto escrito, editado y publicado contra el Islam, el Profeta del Islam y el Corán, junto con todos los editores y editoriales conscientes de su contenido, están condenados a muerte. Hago un llamamiento a todos los musulmanes valientes, dondequiera que se encuentren en el mundo, para que los maten sin demora, para que nadie se atreva a insultar las creencias sagradas de los musulmanes en lo sucesivo. Quien muera por esta causa será mártir, si Dios quiere. Mientras tanto, si alguien tiene acceso al autor del libro pero es incapaz de llevar a cabo la ejecución, debe informar a la gente para que sea castigado por sus acciones.
Que la paz y las bendiciones de Alá estén con ustedes”.
Ayatolá khomeini
Los Versos Satánicos
Esta novela narra, a través de la sátira y el surrealismo, la historia de dos actores indios sobrevivientes a un accidente de avión causado por un atentado, la cual está entrelazada a una serie de historias con alusiones al Islam y a la vida de su profeta Mahoma.
Aunque fue muy elogiada e incluso finalista y ganadora de reconocimientos destacables como el Premio Booker y el Premio Whitbread, respectivamente, fue prohibida en varios países, comenzando por India y Pakistán. Además, no solo fue catalogada como “blasfema” por muchos religiosos musulmanes, sino que también, tras este rechazo, se ofrecieron grandes cantidades de dinero para quien asesinara a Rushdie.
Conversamos con la editora Fiorella Zenteno para conocer más acerca de la sátira, la censura y la libertad de expresión en la literatura.
En primer lugar, Fiorella menciona que el título de esta obra se supondría que sería “Relato de las Sirenas” o “Episodio de las Grullas”, como también se reconoce; por lo que “Los Versos Satánicos” sería un error de traducción al árabe. Sobre esto afirma lo siguiente: “El editor debe ver de qué manera puede hacer el libro más resistente a las críticas y a los ataques”
Además, menciona que la libertad de expresión dentro del arte es un terreno poco explorado, en comparación a la de la prensa o redes sociales:
“En el caso del arte, hay que darle un tratamiento particular, sobre todo porque depende mucho la interpretación que se da por parte del público. El arte se puede interpretar de mil maneras, el arte no busca solamente contar hechos; uno de sus principales objetivos es generar emociones, catarsis, conmoverte”, profundizó.
Dentro del arte, la sátira es un recurso que funciona muy bien como medio de crítica y específicamente en la literatura, se ha empleado desde hace siglos. Sobre esto, Fiorella recuerda al Lazarillo de Tormes, una obra que es abiertamente anticlerical:
“En menos de un año de su publicación apareció en la lista de los libros blasfemos de la Inquisición Española. Y si es que se hubiera sabido quién era el autor, seguramente lo hubieran aniquilado, pero fue y sigue siendo anónimo. Esa fue una gran medida por parte del autor y del editor para mayor protección. Eso faltó en el caso de Rushdie. El escritor generalmente solo escribe y el rol del editor es pensar en a quién se está dirigiendo, quién lo va a leer, de qué manera puede proteger la obra, pero también al autor”.
Círculo de amenazas
Rushdie no fue el único en sufrir la intolerancia del extremismo y el fanatismo:
- En 1991, el traductor al japonés de la obra en mención, Hitoshi Igarashi, fue apuñalado en Tokio.
- Ese mismo año, el traductor al italiano Ettore Capriolo fue apuñalado en Milán.
- En 1993, el editor noruego de Rushdie, William Nygaard, fue gravemente herido en un tiroteo.
- Ese mismo año, el hotel en el que se hospedaba Azis Nesin, el traductor al turco.
- Recientemente, la escritora J.K. Rowling fue amenazada de muerte tras extender su apoyo a Salman Rushdie.
La furia de Irán.
“Rushdie se había expuesto a la ira popular por haber insultado la santidad del islam y transgredir una línea roja para 1.500 millones de musulmanes”, aseveró el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán, Nasser Kanaani.
Si bien es cierto, hasta que este artículo se terminó de redactar, no se confirmó un vínculo entre Matar y la fatua mencionada anteriormente; no obstante, la cadena NBC informó que sus redes sociales exponían que simpatizaba con los extremistas chiítas.
El mundo literario y los defensores de la libre expresión rinden homenaje a Salman Rushdie; mientras tanto, al escritor le espera una larga y dolorosa recuperación, incluyendo una que no es física y que se va agrandando dentro desde 1989, cuando su propia obra lo asomó al precipicio de lo que hoy es uno de los atentados más graves contra la libertad en los últimos tiempos.
Vea en la siguiente cronología todos los ataques que Rushdie y quienes tuvieron alguna vinculación con su libro, sufrieron a lo largo de tres décadas.
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